Siempre es bueno aprovechar nuestras
vacaciones para visitar alguna estación o línea de ferrocarril que pase cerca
de nuestro lugar de veraneo. En este caso he aprovechado para visitar un pequeño
apeadero de vía estrecha de la línea transcantábrica, donde se pueden apreciar
detalles a los que no estamos habituados los que nos movemos en el entorno de
las vías de ancho ibérico.