viernes, 9 de octubre de 2015

El Central de Aragón respira vapor de nuevo para el rodaje de "The promise"

     A partir del día 9 de octubre y con motivo del rodaje de la producción "The promise", podemos disfrutar de la circulación de la locomotora de vapor 2723 Norte Verraco entre las estaciones de Segorbe y Jérica.


     Para la filmación de esta producción de Hollywood la productora ha decidido rodar una serie de escenas con un tren remolcado por esta locomotora, para lo cual ha sido trasladada a la estación de Jérica mediante un camión góndola. En esta estación ha sido colocada sobre las vías junto con un grupo de vagones J donde permanecerá apartada en espera del momento de la filmación de varias escenas en las proximidades del túnel de Navajas.



     La locomotora 2723 ex Norte fue construida en Bélgica por Tubize en 1891, tiene rodaje 0-4-0 con ténder separado y es propiedad de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles. Tiene 15,8 metros de longitud, pesa 44,6 Tm en vacío y 50 Tm en servicio y desarrolla una potencia de 675 CV (496 KW). Esta locomotora esta custodiada por la AVAF (Asociación Venteña de Amigos del Ferrocarril) que es la que la mantiene en estado de marcha y ha promovido su restauración y puesta en servicio. Fue restaurada por ARMF y es utilizada esporádicamente para remolcar trenes turísticos.


     Las dificultades impuestas por Adif a la circulación de esta locomotora han obligado a utilizar la carretera como medio de transporte hasta el lugar de la filmación. Como tren de apoyo por parte de Renfe se ha dotado la locomotora 334.004 de Larga Distancia junto con dos plataformas. La utilización de esta última locomotora de apoyo también supone una novedad, ya que no hay constancia de que una locomotora de esta serie haya circulado por esta línea con anterioridad. Además, la Unidad de Negocio gestora, Larga Distancia Renfe, decidió abandonar la circulación de trenes por esta línea desde principios de los años 90 del pasado siglo. 




jueves, 1 de octubre de 2015

Construcción de un talgo BT auscultador (y 3)

La elaboración de la cabina


Prueba de encaje de la cabina con la carcasa

     La parte más difícil, pero también la más característica, la constituyen los frontales del tren. En las piezas de resina que hemos hecho sólo hemos marcado los elementos que incorpora la cabina. Hay que realizar un vaciado con taladro y lima de la parte correspondiente a los cristales laterales y frontal y a los focos. En este caso ha sido necesario también vaciar por dentro puesto que necesitábamos espacio para los elementos de iluminación y decoración del interior de la cabina. Esta parte puede ser más fácil si incorporamos más detalles en el momento de la elaboración del molde. En el interior también hemos incorporado sendos puestos de conducción que teníamos disponibles y que provienen de la misma locomotora de la que hemos sacado el motor y el bastidor. En la trasera de la pieza de resina hacemos un rebaje de medio milímetro para que nos encaje en la caja del vehículo que realizamos con poliestireno.


Vaciado de las ventanas y rebajes.
Masillado parcial para corregir imperfecciones

     En la parte exterior conviene remarcar los relieves y hemos tenido que alisar las irregularidades de la pieza. Esto lo hacemos con lima y lija de agua. Para rellenar las imperfecciones se puede utilizar masilla, pero yo he usado cianoacrilato al que he espolvoreado bicarbonato sódico, con lo que se obtiene un relleno muy duro que se puede lijar y mecanizar. Las pequeñas imperfecciones que quedan se igualarán en la fase de pintura.


Hemos colocado en el interior un puesto de conducción
e enstalado iluminación para los focos frontales

Prueba de iluminación con los leds frontales ya incorporados


La pintura


     Hemos aplicado una primera mano de pintura blanca  a las piezas de resina para facilitar la igualación del color con el resto del vehículo. Una vez pegadas las cabezas a las cajas de sus respectivos coches procedemos a pintar los vehículos. Damos una capa de pintura blanca a todos ellos. Si es preciso se aplica una segunda capa.

Primera capa de pintura blanca. Al remolque con cabina ya le hemos
añadido el guiacables y detalles del techo

     Enmascaramos para hacer la línea verde característica de los coches intermedios y en los extremos taparemos las partes blancas para pintar los detalles verdes. El techo del remolque con cabina es blanco mientras que el del motor es verde. Aplicamos dos manos.



Enmascarado de los extremos cuyo color verde lo pintamos por fases

     Una vez seca la pintura hemos marcado los ribetes de las ventanas con rotulador permanente. También hemos remarcado las juntas de las puertas que hasta ese momento permanecían en relieve tras marcarlas con la punta de la cuchilla.


Pintamos la banda lateral verde y los marcos
de puertas y ventanas

     Después colocamos las calcas con los logotipos frontales y la rotulación de las letras laterales grandes y las más pequeñas del logotipo de Adif y Talgo en los lados y la numeración de los vehículos.




Incorporación de las calcas con los logotipos y rotulaciónes

     Completada la pintura de los cuatro coches, aplicamos una capa de barniz brillante, ya que el modelo real se caracteriza por el brillo de su pintura. El barniz protege la pintura y fija las calcas.


Aspecto final de la tractora


Los cristales


     La colocación de los cristales de las ventanas laterales no presenta ninguna dificultad especial. En este caso he optado por una doble lámina en la que la exterior es más rígida. La lámina interior realiza el efecto espejo utilizando plástico antiestático del que suele proteger las tarjetas y componentes electrónicos. Si se pretende obtener un tono todavía más oscurecido, se puede aplicar una capa suave de pintura negra o marrón oscuro por su interior.  En este caso debemos asegurarnos de que el color quede uniforme.


Pruebas de amoldado del cristal de las ventanas frontales

     Lo más difícil con diferencia es la construcción de los cristales curvos del frontal. Yo he utilizado plástico “pet”, es decir plástico moldeable térmicamente a partir del envase de una botella de agua. Para facilitar la adaptación es preferible buscar en la parte del cuello de la botella una curvatura que ya sea similar a la que pretendemos obtener. Después adaptaremos la forma a la de nuestra cabina aplicando calor. Esto lo podemos hacer mediante un secador de pelo o bien mojando en agua muy caliente. A la vez que aplicamos el calor debemos “domar” la lámina presionando para que adquiera la forma definitiva. En esta etapa es frecuente aplicar el método de la prueba y error. Tendremos que desechar algunas piezas que no queden bien. Como en todas las facetas del modelismo, cuanto más tiempo dediquemos a esta parte y más paciencia le pongamos, el resultado será mejor. Aun así, en mi caso, tras cortar la pieza a medida no he logrado un ajuste total, pero como decía al principio, al ser una técnica novedosa para mí, he considerado el resultado aceptable.



     Para los cristales de los faros el proceso es el mismo pero para una lámina plástica de  tamaño mucho menor. La colocación de todos los cristales será lo último que hagamos, ya que se debe hacer después de la fase de pintura. Cuando tenemos los cristales cortados al tamaño final realizamos con rotulador indeleble negro el fileteado lateral de los mismos.

Nuevamente probamos el funcionamiento en vía

      Como la colocación de los cristales frontales es delicada hemos realizado las pruebas de rodadura sin ellos. Así podemos ajustar y retocar algunos elementos mecánicos del tren  sin que sufran los elementos más delicados.

     El pegado de los cristales frontales lo he realizado con cola blanca. El resultado es aceptable, pero al intentar reforzar la unión con cianoacrilato, han aparecido en una de las cabinas los temidos velos blancos. No quedará más remedio que conducir con precaución para evitar choques.


Los detalles finales


     Para completar la decoración del modelo colocamos los elementos auxiliares de auscultación en el remolque extremo. Hemos construido artesanalmente la cámara de video del extremo y los dos focos centrales. Simulamos su cableado con sendos finos trocitos de cable de color negro. En el lado de la cabina se halla el pantógrafo. Ante la dificultad de obtener uno comercial de tres apoyos, decidí construir uno. Su elaboración es muy sencilla a partir de lámina plástica negra para la parte de los frotadores y cable convenientemente curvado para los extensores. La existencia de un cilindro neumático en el brazo principal del pantógrafo real (el pantógrafo real no es funcional) facilita la reproducción. Los aisladores están hechos con hilo de cobre fino enrollado y separan el pantógrafo y los elementos auxiliares del techo. Más adelante disponemos otro conjunto alineado de focos y sensores de auscultación. Pintamos todos los elementos menos la cámara de negro, como en el original.


Añadimos el pantógrafo, focos, sensores y cámaras en el techo
del remolque extremo

     También fabricamos con unas tiras de alambre plano los pasamanos de acceso a las puertas de la locomotora y los tiradores de las puertas.


Últimos detalles: limpiaparabrisas y maneta
del Scharfemberg

     Para terminar hemos realizado con grapas convenientemente dobladas los limpiaparabrisas y el tirador del enganche Scharfemberg. Los hemos pintado de negro y  se hallan alojados en finos agujeros taladrados al efecto. También hemos realizado unos faldones inferiores frontales (apartavacas) a partir de unas réplicas de resina. A lo largo de la vida del tren, estos faldones estarán muy expuestos a golpes, por lo que hemos utilizado la mezcla de cianoacrilato y bicarbonato para su fijación. Una vez acoplados y ajustados los laterales, los hemos pintado también de negro como en el original.



      Finalmente ya podemos poner el tren a rodar por nuestra maqueta. Y no hay que olvidar realizar pasadas periódicas con nuestro nuevo tren auscultador de vía y catenaria para asegurar el correcto estado de la geometría de nuestras vías y el estado de nuestro hilo de contacto.




CS