Adición de un pequeño módulo intercalario en nuestra maqueta

     Desde que completamos la expansión de nuestra maqueta principal de escala H0 hace ya algún tiempo notamos que en uno de los puntos había un pequeño defecto de geometría que provocaba problemas en la circulación de algunos de nuestros trenes.

     Para solucionar este problema, y dada la falta de espacio, decidimos introducir un pequeño módulo intermedio que facilitase el tránsito por el tramo de vía conflictivo. A continuación detallamos el proceso de construcción del módulo y su incorporación a la maqueta.

     El punto que genera problemas en nuestra maqueta se halla en un tramo de vía formado por una curva y contracurva. En el momento de la construcción, esta disposición del trazado venía obligada por la necesidad de salvar una columna y enlazar con el módulo segregable y abatible de cierre en semicírculo, lo que generaba un trazado forzado con curvas de radio reducido. A la larga se observaron problemas en la circulación de los trenes más largos (como el Ter) o de locomotoras con bogies de tres ejes, que son los que habitualmente presentan más problemas para su inscripción en las curvas.

Estado original con el módulo de cierre
y tramos de enlace forzados

      La solución adoptada fue la construcción de un corto módulo intermedio cuya finalidad es aumentar el recorrido de la transición defectuosa para suavizar el trazado. Ello nos permite en uno de los lados el ataque al desvío y al bucle de cierre en recta y la corrección de un bache en el otro de los lados mediante una recta de transición.

     La parte más sencilla fue la construcción de un cajón de base de 16 centímetros de ancho (longitud máxima alargable del conjunto). Esta construcción no presenta ninguna dificultad y se realizó con aglomerado de 10 mm, es decir el mismo material utilizado para la construcción del resto de nuestra maqueta.

Cajón en bruto del nuevo módulo de 16 cm

     Seguidamente procedemos al levantamiento de la vía defectuosa entre el módulo y el primer desvío de nuestra playa de vías (fiddle yard). En esta fase quitamos la vía y retiramos todo el balasto que se halla en la parte superior del corcho que conforma la base de nuestra vía original.

El levantamiento del tramo de vía original deja a a vista 
el sustrato de corcho

     Marcamos el nuevo trazado más suave, que obliga a un desplazamiento lateral de la vía, lo que en el argot ferroviario se denomina ripado de la vía.

Nueva base de corcho adaptada
 al nuevo trazado

     El nuevo trazado sobresale del lecho de corcho, por lo que debemos añadir unas tiras de cocho adicionales en uno de los lados del trazado además de pegar el nuevo lecho en el módulo nuevo. A simple vista se aprecia un desagradable punto de contacto entre la banqueta original y la nueva, pero no nos preocupamos porque posteriormente quedará disimulado con el balasto.

Las discontinuidades se igualarán
con el nuevo balasto

     Con la traza marcada colocamos la vía en su sitio y la pegamos. Para evitar problemas en las uniones utilizamos vía flexible en todo el tramo. Los cortes de los carriles se harán posteriormente.

Para pegar la vía en su sitio nos
ayudamos de algunos pesos

     Cuando la vía ya está fijada realizamos pruebas de rodaje. Con los resultados satisfactorios, procedemos a la cobertura de balasto de la caja y los laterales de la vía. La fijación de este balasto se realiza por goteo de cola blanca diluída en agua al 50% y unas gotas de lavavajillas. Aprovechamos este proceso para rellenar de nuevo balasto la parte expuesta del antiguo trazado, de manera que nos quedará una acumulación de balasto en uno de los lados de la vía tal y como ocurre en procesos de ripado en el ferrocarril real.

Colocación del nuevo balasto

     Con el nuevo balasto seco, pasamos la aspiradora para eliminar los restos sueltos y mediante el paso de algunos de nuestros trenes comprobamos que no interfiere con el paso de las pestañas de las ruedas.

Resultado final tras rematar la 

decoración en el tramo izquierdo

Sección derecha del módulo terminada 

     Ya sólo queda decorar el resto del nuevo módulo dando continuidad a los viales mediante piezas realizadas con cartulina impresa y rematar la decoración vegetal con flocado consistente en mezcla de arena roja y viruta de serrín tintada de verde. Finalmente simulamos cobertura vegetal arbustiva con espuma verde sobrante de la construcción de la expansión de nuestra maqueta.

Resultado final donde ya circulan bien nuestras
locomotoras más exigentes