Dedicamos
la entrada de hoy a una importantísima figura en la historia de la construcción
y el desarrollo del Ferrocarril Central de Aragón: el ingeniero francés Georges
Rambaud. Este ingeniero fue uno de los artífices de los que se valió la Société Générale pour favoriser l’industrie
Nationale (SGB) para llevar a cabo la construcción del Ferrocarril Central
de Aragón.
Línea del FC Central de Aragón (Miscelánea Turolense) |
La
dirección del Central de Aragón encomendó a Georges Rambaud la construcción del tramo
sur de la línea entre Teruel y Valencia a través de la compañía Société Anonyme de Construcction de Chemins
de Fer en Espagne. En esta función desarrolló labores de replanteo de
proyectos y el correspondiente visado y supervisión de las obras de construcción.
Documento original con el membrete de las dos sociedades encargadas de la construcción (Archivo ATAF). |
Poco sabemos directamente sobre la biografía de este ingeniero, pero, sin embargo, en las fuentes indirectas encontradas siempre aparece como un hombre capaz, negociador y de talante conciliador. Eran estas características muy necesarias en una labor tan complicada como lo es la construcción de un ferrocarril, en la que aparecen innumerables problemas de toda índole que hay que solventar. Contrasta esta actitud con la mostrada por Monsieur Florentin Lapôtre, el ingeniero director encargado de la construcción del tramo norte de la obra desde Calatayud a Teruel, a quien, al parecer le costaba mucho adaptarse a la idiosincrasia de la mentalidad española. Este último debía ser un hombre con fuerte personalidad que chocaba con la forma de hacer las cosas en España y sobre todo a la hora de exigir rendimiento en los trabajos de construcción, que casi nunca avanzan al ritmo propuesto por la dirección. Esta forma de llevar los trabajos le granjeó fuertes críticas por parte de la prensa de la época, que se hacía eco de los innumerables conflictos en los que se enfrascaba la empresa con los trabajadores en los diferentes tajos.
Las expectativas de desarrollo creadas por el nuevo ferrocarril afectaban a gran parte del territorio nacional (Miscelánea Turolense) |
En cambio el tratamiento otorgado por la prensa a Georges Rambaud fue muy distinto. En sus labores de supervisión de la construcción obtuvo un primer reconocimiento cuando logró encontrar agua para el abastecimiento de las locomotoras en Sagunto, donde los ingenieros de Norte no habían logrado encontrar veneros con agua en cantidad y calidad suficiente. Posteriormente tomó el relevo a Lapôtre tras la paralización de trabajos en las inmediaciones de Teruel. Los obreros criticaban la penosidad de los trabajos y la poca retribución que recibía, hasta el punto de que los peones abandonaban la construcción del ferrocarril para reanudar las labores en el campo. El conflicto culminó en un incendio de las oficinas de la compañía en la capital turolense, lo que provocó un nuevo retraso en los trabajos. Fue entonces Rambaud quien retomó las negociaciones y fue el artífice de un acuerdo que desatascó la situación pudiéndose proseguir con las obras. La prensa del momento (El Eco de Teruel) recoge los elogios con las siguientes palabras. “Así como se acrecientan las simpatías hacia el Sr. Rambaud... disminuye el afecto al Sr. Lapotre... Esto no debe extrañarnos en razón de que el primero atempera su conducta á los deseos del país, y procura conciliar toda clase de intereses tratando con cariño y benevolencia á cuantos están bajo su dirección, y en cambio el segundo tiene el prurito de hacer lo contrario, captándose eternas enemistades con cuantos con él tratan”.
Tanto los carriles como las traviesas metálicas procedían de las acerías belgas (Foto CS) |
Una vez finalizada la construcción, Rambaud mantiene su vinculación con la compañía siguiendo de Consejero Delegado en la Sección Belga del Consejo de Administración del Central de Aragón, aunque traslada su labor a la sede de la compañía en Bruselas. Desde la capital belga compatibiliza estas labores junto con la pertenencia a otros consejos de administración de filiales de la SGB como la Compagnie Francaise des Chemins de Fer de L’Indochine et du Yunnan o la Compagnie des Chemins de Fer Secondaires.
En su función de Consejero Delegado,
Rambaud mantuvo una comunicación permanente con los directivos del Central de
Aragón (muchos de ellos también de origen Belga) e impartió consejos e instrucciones
sobre las inversiones necesarias propuestas desde España. Esta situación se
mantuvo hasta 1926, año en el que el Central de Aragón es comprado por la
compañía Norte. Aun así, más tarde de esa época eran frecuentes los contactos
entre los directivos del ferrocarril y sus ex-colegas belgas para consultar
sobre algunas cuestiones concretas.
Georges
Rambaud fallece en 1933 y el nuevo Consejo de Administración dependiente de
Norte reconoce con una sentida mención
la labor ejercida por Rambaud durante toda su vida para el logro de la construcción del
ferrocarril y el buen funcionamiento de la compañía durante todo este periodo.
CS
Fuente: Historia del Ferrocarril Central de Aragón, Carlos Sanz Aguilera.-Ed Saraqusta - 2010.
No hay comentarios :
Publicar un comentario